Dinamarca fue la primera en dar la voz de alarma el pasado lunes 26 de septiembre tras detectar una fuga de gas en uno de los tramos del gasoducto Nord Stream 2 cerca de la isla de Bornholm. Horas después, se detectó una caída de la presión en el Nord Stream 1, la tubería original y que lleva semanas paralizada por un supuesto problema en una estación de suministro rusa. A las horas, ya eran tres las fugas detectadas. Dos de ellas sobre aguas suecas. La cuarta, tardaría en detectarse varias horas más. Los científicos del Instituto Noruego de Investigación del Aire (NILU) estimaron en un primer momento que las fugas totales de metano de las tuberías de gas natural del gasoducto Nord Stream podrían ser de, al menos, 40.000 toneladas . Hoy, 30 de septiembre, las nuevas estimaciones elevan ese número a 80.000 toneladas. Esto es, cuatro veces más que la emisión anual de metano de la industria noruega de petróleo y gas (que es de 170.000 toneladas anuales, según la Oficina Estatal de Estadística de Noruega) El martes, las mediciones del observatorio noruego Birkenes, así como de varios sitios en el país vecino, Suecia, «detectaron concentraciones extremas de metano en el aire», según detalla el NILU. « Nunca habíamos visto algo así en ninguno de nuestros observatorios», dice la científica Cathrine Lund Myhre. Niveles extremos Los científicos del NILU calcularon las estimaciones preliminares de una posible liberación de gas durante 24 horas en base al tamaño de las tuberías del mayor gasoducto de Europa: «Con muchas suposiciones sobre la presión real en las tuberías y la tasa de liberación, primero descubrimos que al menos 40.000 toneladas de metano pueden haberse liberado en el océano y la atmósfera», señala el científico Stephen Matthew Platt. «Hemos hecho nuevos cálculos y, a 30 de septiembre, estimamos que se han liberado al menos 80.000 toneladas de metano de los gasoductos de Nord Stream«. Ningún efecto «En espacios cerrados, es inflamable y produce asfixia por desplazamiento del oxígeno, pero diluido en la atmósfera, no creo que llegue a dar problemas para la salud de las personas» Doctora Cristina Martínez Neumóloga y coordinadora del área de medio ambiente de la SEPAR Una fuga de metano tan grande es muy dramática, pero apenas tiene consecuencias nocivas para la salud de los seres humanos. Tampoco la tiene para el medioambiente ni la biosfera marina . Incluso cantidades como las que ahora se están diluyendo en la atmósfera en gran parte del norte de Europa no suponen un riesgo para la salud de los humanos o los animales. MÁS INFORMACIÓN noticia Si «Es un chapapote invisible»: las fugas del Nord Stream emitirán el mismo CO2 que toda la flota de vehículos de España en un año noticia No Alerta en Dinamarca y Suecia tras registrarse varias fugas en los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2 noticia Si Bornholm: La estratégica isla danesa afectada por la fuga de gas ruso alberga un radar de la OTAN «El metano es el segundo gas de efecto invernadero más importante después del dióxido de carbono (CO2)», explica a ABC la doctora Cristina Martínez, neumóloga y coordinadora del área de Medio Ambiente de la SEPAR. «En espacios cerrados, es inflamable y produce asfixia por desplazamiento del oxígeno , pero diluido en la atmósfera, no creo que llegue a dar problemas», continúa. Pero insiste en que «no pone en peligro a nadie».
Source: abc internacional