Scholz, siempre menos entusiasta en sus valoraciones pero optimista y aliviado por volver a recibir a Macron en la Cancillería de Berlín, en lugar de a Le Pen, ha reconocido la existencia de esa «familia europea» y ha adelantado que la propuesta le parece «muy interesante». Todavía no hay detalles sobre el proyecto y solo se concretarán después del consejo europeo de mayo y de la cumbre de la OTAN de Madrid. A principio de verano tendrá lugar el próximo consejo de ministros conjunto de Alemania y Francia, reunión que los dos gobiernos mantienen dos veces al año, y hasta entonces habrá equipos bilaterales trabajando en ello.
Organización más amplia que la UE
La «idea» para la que Macron ha venido a recabar el apoyo de Alemania consistiría en una organización, más amplia que la UE, que permita articular una nueva estructura política en la que las democracias cooperen en ámbitos como como seguridad y energía. «Formamos una comunidad de valores y una comunidad geoestratégica, no hay más que mirar el mapa», ha justificado el presidente francés, que ha defendido la necesidad de «unir nuestra Europa, en la verdad de su geografía, sobre la base de sus valores democráticos, con la voluntad de preservar la unidad de nuestro continente y conservando la fuerza y la ambición de nuestra integración». «Un procedimiento acelerado para Ucrania conduciría a bajar los estándares de nuestra integración, algo que no merece nuestra UE, pero la UE, dado su nivel de integración y ambición, no puede ser la única manera de estructurar el continente europeo en el corto plazo», ha explicado.
«Esta nueva organización europea permitiría que naciones democráticas se adhieran a nuestros valores fundamentales para encontrar un nuevo espacio de cooperación», ha dicho, que podría incluir cooperación política, de seguridad, cooperación energética, transporte, inversión, infraestructuras y movimiento de personas, aunque también ha enfatizado que unirse a esa nueva organización no garantizaría la futura pertenencia a la UE.
Independientemente de esta nueva fórmula, ambos han estado de acuerdo en que la UE debe seguir adelante con sus pasos de integración y se han referido concretamente a la eliminación del requisito de unanimidad en las votaciones de política exterior, de la que Alemania parece más dispuesta a prescindir. Macron se ha limitado aquí a decir que «debe seguir ese debate hasta encontrar puntos de convergencia».
Scholz se siente tentado por la oportunidad de establecer contactos más rápidamente con Ucrania y los Balcanes Occidentales, que cree que «pertenecen a Europa» pero necesitan tiempo para llevar a cabo las reformas estructurales necesarias. Le gustó especialmente hablar de esta propuesta el 9 de mayo, «Día de Europa, una señal importante de lo que está por venir», y elogió los esfuerzos de Macron para subrayar las diferentes interpretaciones que tiene Europa de la festividad en comparación con las celebraciones en Moscú. «Dibujamos dos imágenes muy diferentes del 9 de mayo. Por un lado, querían demostraciones de poder e intimidación, un discurso decididamente bélico, mientras aquí una coalición de ciudadanos y parlamentarios trabajaba en un proyecto conjunto sobre nuestro futuro», describió.
Source: abc internacional