El Departamento de Justicia de EE.UU. presentó este miércoles sus primeras imputaciones por crímenes de guerra cometidos en la guerra en Ucrania , relacionadas con las torturas sufridas por un ciudadano estadounidense a manos de cuatro soldados rusos en abril del año pasado. Los cargos son por tortura, maltrato y confinamiento ilegal de este estadounidense, al que el escrito de imputación no nombra, pero detalle que vivía en Mylove, una localidad en el sureste del país que cayó bajo control de las fuerzas rusas. Según la fiscalía estadounidense, la víctima no participaba en el conflicto y estaba protegida como civil por la Convención de Ginebra. Los imputados son dos oficiales rusos, Suren Seiranovich Mrktchian y Dmitri Budnik , y dos soldados de los que no se cuenta con sus apellidos, Valeri y Nazar. EE.UU. les acusa de interrogar, torturar y amenazar con matar a la víctima, a la que llegaron a realizar una ejecución falsa, en la que le pidieron que dijera sus últimas palabras, le apuntaron en la nuca y dispararon a otro lado. Noticia Relacionada estandar No Acusan a la ONU de mirar para otro lado con la violencia sexual de Hamás Javier Ansorena En una sesión en la sede de Nueva York en la que se relataron auténticas atrocidades cometidas por los terroristas se puso énfasis en la indiferencia mostrada por ONU Mujeres Es la primera vez que se utiliza una legislación aprobada en la década de 1990 que permite perseguir crímenes de guerra perpetrados contra estadounidenses en el extranjero. En el caso de los cuatro imputados, que están fugados, es muy difícil que algún día sean juzgados por estas acusaciones. Pero eso no impedirá a EE.UU. perseguir esos delitos, defendió el fiscal general de EE.UU., Merrick Garland, en el anuncio público de las imputaciones: «El Departamento de Justicia y el pueblo de EE.UU. tienen mucha memoria», dijo. «No olvidaremos las atrocidades en Ucrania y no pararemos de trabajar para llevar a sus responsables ante la justicia».
Source: abc internacional