Arranca el próximo mes de diciembre el juicio en el que dos adolescentes de 17 años serán juzgados como adultos por el asesinato hace un año de su profesora de español en Fairfield, una localidad de alrededor de 10.000 habitantes en Iowa (Estados Unidos). Los jóvenes acabaron con la vida de la maestra a golpes con un bate de béisbol y enterraron el cadáver en un parque al que ella solía acudir a caminar por las tardes. Willard Miller, uno de los acusados, se citó con la profesora, Nohema Graber, de 66 años , en el instituto para hablar de sus pobres notas en la asignatura de lengua española. Todo ocurrió en un parque Es precisamente la bajada de la calificación de Miller y su presunto cómplice, Jeremy Goodale, lo que constituyó el móvil del crimen, según se recoge en los informes de la investigación. Tras el encuentro en el instituto, la profesora acudió en su furgoneta al citado paraje por el que daba sus habituales paseos, tal y como se recoge en las declaraciones de varios testigos. Ese mismo vehículo fue después visto saliendo del parque con dos hombres en los asientos delanteros. Testigos y una conversación en Snapchat, claves Una vez que se halló el cuerpo de la profesora tras la denuncia interpuesta tras su desaparición, las sospechas condujeron hasta los dos acusados, por testimonios de testigos y una conversación en Snapchat interceptada por las autoridades. En un principio, Miller, uno de los acusados, aseguró que le habían obligado «chicos enmascarados» En un principio, Miller, uno de los presuntos autores, declaró que «chicos enmascarados» le obligaron a usar su carretilla para mover el cuerpo y conducir la furgoneta de la profesora pero que no tuvo participación directa en el crimen. Ahora, deberán sentarse en el banquillo como adultos y se enfrentan a pena de cadena perpetua. Sin embargo, las leyes de Iowa contemplan que, hasta en los delitos criminales más graves, se contemple la opción de condicional pasado un tiempo en casos de encarcelados menores.
Source: abc internacional