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Berlusconi obliga a Meloni a maquillar su programa antieuropeísta

Solo Giorgia Meloni , líder de Hermanos de Italia, puede considerarse gran triunfadora en las elecciones italianas del domingo , con un resultado pocas veces visto en la historia de la República italiana: Pasó del 4,35% en los comicios del 2018 al 26%, convirtiendo a su partido, fundado en el 2012, el primero del país, logrando una amplia mayoría parlamentaria. Su primer mensaje al país, con tono moderado, ha sido de tranquilidad: «Es la hora de la unidad y de la responsabilidad». El resto de los principales líderes políticos se lamen las heridas de la derrota, especialmente en la izquierda, como ha hecho Enrico Letta , secretario del partido Democrático, que ha dimitido, o Matteo Salvini , en caída libre como líder de la Liga, mientras otros justifican sus mediocres resultados con falsos argumentos, como Giuseppe Conte , presidente del Movimiento 5 Estrellas, o el líder de Forza Italia, Silvio Berlusconi, aunque éste puede jugar un papel fundamental en el bloque de las derechas. Giorgia Meloni será la primera mujer y la primera posfascista que llega al Palacio Chigi, sede de la jefatura del Gobierno, en la historia republicana de este país. En su primer discurso tras la victoria destacó que quiere gobernar para todos: «Esta es la hora de la responsabilidad, si queremos hacer historia. Italia nos ha elegido y no la traicionaremos. Si hemos sido llamados a gobernar, lo haremos para todos los italianos con el objetivo de unir a este pueblo, de realzar lo que lo une y no lo que lo divide», dijo Meloni. Sin duda, es un acontecimiento excepcional en Italia, donde se abre una nueva época, y lo es también para Europa. Noticias Relacionadas estandar No La coalición de derechas vence con claridad en las elecciones italianas: euroescepticismo y una derecha fragmentada en la Italia de Meloni Ángel Gómez Fuentes estandar Si Estas son las políticas que aplicará un posible Gobierno de derechas en Italia Ángel Gómez Fuentes  Consciente de esta responsabilidad, Giorgia Meloni dejó también este claro mensaje: «Las condiciones en las que Italia y la Unión Europea se encuentran son particularmente complejas, necesitamos la contribución de todos y un clima sereno, así como el respeto mutuo». Hoy en las redes sociales, Giorgia Meloni escribió este mensaje: «Los italianos nos han confiado una responsabilidad importante. Ahora será nuestra tarea no decepcionarlos y hacer todo lo posible para devolver la dignidad y el orgullo a la nación». El mensaje más dulce que ha recibido Meloni, tras el triunfo electoral, lo ha escrito con rotulador y letras mayúsculas sobre una hoja de papel su hija Ginevra de seis años: «Querida mammina, me alegro mucho de que hayas ganado. Te quiero mucho», frase acompañada con un corazón. Ginevra es la hija que la líder de Hermanos de Italia tuvo hace seis años con su pareja, el periodista de izquierdas Andrea Giambruno. EE.UU. a Meloni: «Italia, aliado vital» Estados Unidos a Meloni: «Italia, aliado vital» Escuchando a Meloni, muchos analistas consideran que el resultado electoral hace girar a Italia hacia la derecha, pero hay motivos sólidos para pensar que la líder del bloque de derechas no conducirá al país hacia el extremismo, opinión expresada en ciertos medios fuera de Italia. La líder de Hermanos de Italia ha sabido Meloni establecer sólidas relaciones con Estados Unidos, en línea con el Gobierno de Mario Draghi, apoyando con firmeza las sanciones a Rusia y el envío de armas a Ucrania. Muy significativo al respecto ha sido el mensaje que ha escrito en twitter el secretario de Estado norteamericano Anthony Blinken: «Tras las elecciones italianas de ayer, estamos ansiosos por trabajar con el Gobierno de Italia en nuestros objetivos compartidos: apoyar una Ucrania libre e independiente, respetar los derechos humanos y construir un futuro económico sostenible. Italia es un aliado vital, una democracia fuerte y un socio valioso», concluye el secretario de Estado Blinken. No vuelve el fascismo Algunos decían incluso que si ganaba Meloni era una victoria de los fascistas. Seguramente se olvida que Italia es un país tradicionalmente de derechas, que, bajo la Democracia Cristiana, fue gobernado durante décadas por la derecha, y posteriormente por el centroderecha de Forza Italia de Silvio Berlusconi. Difieren en modelo de sociedad, en programas y en ciertos valores el bloque de derechas e izquierdas, pero a las voces que hablan de vuelta del fascismo en Italia con la victoria de Meloni, responde el politólogo y filósofo, Massimo Cacciari, de izquierdas, exalcalde de Venecia: «Eso es una colosal estupidez. Meloni sabe que si tan solo intentara poner en práctica una de las recetas fascistas, los italianos se rebelarían». El programa electoral de los Hermanos de Italia omitió algunas propuestas polémicas que fueron adoptadas por el partido, como afirmar la primacía de la legislación nacional sobre la de la UE. Eso no se lo hubiera permitido un partido europeísta como Forza Italia de Berlusconi. Il Cavaliere, que el próximo jueves cumplirá 86 años, está dispuesto a jugar un papel decisivo en el futuro Gobierno. Berlusconi obtuvo 14,4% en las elecciones del 2018, y el domingo 8,28%. Es un fracaso, pero se le daba ya por muerto y él considera que ha vuelto a resucitar políticamente, hasta el punto de señalar que «será el director del próximo gobierno». El Ejecutivo Meloni iniciará su andadura con una sólida mayoría parlamentaria. Pero está por ver si dura toda la legislatura, cinco años. En Europa, el partido de Berlusconi forma parte del mismo grupo que Von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea. Il Cavaliere, que se define como moderado y europeísta, pretende jugar un papel relevante en el Gobierno y no admitiría un alejamiento italiano de Europa. En ese caso, podría abandonar el Gobierno y provocar incluso la caída de Meloni. No habrá apocalipsis El apocalipsis que pronosticaban algunos medios tampoco se producirá, porque la estabilidad de la política italiana está garantizada en gran medida por una Constitución , escrita precisamente para evitar tentaciones de retorno al fascismo. Italia cuenta además con instituciones sólidas, como el Tribunal Constitucional, las dos Cámaras del Parlamento, y el Banco Central, Bankitalia, con brillantes ejecutivos, como el actual ministro de Economía, Daniele Franco. Mario Draghi fue su gobernador entre el 2006 y 2011, antes de ser presidente del BCE. Y entre todas las instituciones de garantía, cabe destacar la presidencia de la República. El inquilino del Palacio Del Quirinal, Sergio Mattarella, goza de gran popularidad en Italia y prestigio internacional. Mattarella gestionará la delicada transición de poderes del Gobierno Draghi al nuevo Ejecutivo. Por reglas de la Constitución y del palacio del Quirinal, Mattarella es muy riguroso y no hace descuentos. Por ejemplo, no admitiría el nombramiento de un ministro sobre el que haya alguna duda en relación con el cumplimiento de los compromisos internacionales de Italia. Para el calendario de formación del nuevo Gobierno hay ya una fecha: el 13 de octubre se reunirán por primera vez las nuevas Cámaras,: 400 diputados y 206 senadores, incluidos los seis vitalicios. La Constitución establece que las dos ramas del Parlamento se convocan «a más tardar el vigésimo día» después de la votación. A partir de esa fecha comenzarán las consultas del presidente Mattarella con los partidos, encargará a Meloni la formación de Gobierno. Los tiempos para que Meloni presente a Mattarella la lista definitiva de ministros y el Jefe del Estado dé su aprobación, dependerá de las negociaciones entre el bloque de derechas sobre el reparto de carteras ministeriales.
Source: abc internacional

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