X
    Categories: Internacionales

Zelenski recibe al líder de la oposición alemana tras negarse a reunirse con el canciller y el presidente

El primer político alemán en visitar Kiev ha sido este martes el líder de la oposición conservadora (CDU), Friedrich Merz, que antes de la reunión de una hora con Zelenski había visitado la ciudad de Irpin y quedó conmocionado por los testimonios de las víctimas del ataque ruso. La conversación con el presidente ucraniano fue «extraordinariamente buena en términos de ambiente y contenido», dijo después Merz en Twitter, sin dar más detalles porque quería primero informar al canciller, Olaf Scholz.

El viaje de Merz ha dejado en evidencia al Partido Socialdemócrata (SPD) de Scholz, que ha mantenido posturas ambiguas y ha retrasado cuanto ha podido la participación alemana en los paquetes de sanciones europeas. Cuando el presidente de Alemania, el también socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier, quiso el mes pasado visitar Ucrania, Zelenski se negó a recibirle y tuvo que cancelar el viaje oficial. Después de ese desplante, Scholz ha evitado la visita de apoyo que, a cuentagotas, van realizando a Ucrania los jefes de Gobierno europeos. Pero el embajador de Ucrania en Berlín, Andriy Melnyk, un diplomático especialmente combativo, ha calificado esa negativa como otra muestra de debilidad de Scholz. Melnyk se ha burlado en las redes sociales, diciendo que «jugar a hacerse la salchicha de hígado insultada no suena muy estadista», en referencia a un tipo de salchicha alemana especialmente flácida. «Se trata de la guerra de aniquilación más brutal desde la invasión nazi de Ucrania, no es un jardín de infancia», ha añadido.

El horror de Irpin
El hecho de que el presidente alemán no sea bien recibido en Kiev y que el canciller ni lo intente contrasta visiblemente con la «amplia invitación del Gobierno y del Parlamento de Ucrania» de la que presume Merz. Cuando comunicó al Gobierno su intención de viajar, los servicios de Inteligencia le pidieron que retrasase el proyecto para dar tiempo a garantizar su seguridad, pero él rechazó las precauciones y se metió en un tren nocturno que le llevó, en primer lugar, a visitar la ciudad de Irpin. «El alcalde me acaba de describir con palabras muy impresionantes lo que sucedió aquí, qué víctimas hay que llorar aquí, pero también qué gran logro», dijo Merz tras entrevistarse con las autoridades locales, «creo que en Alemania todavía estamos obligados a ayudar a este país y especialmente a ayudar a reconstruir una ciudad como Irpin».

Después, según ha hecho público el Gobierno ucraniano a través de su asesor, Sergey Leshenko, se reunió en Kiev con el jefe de la oficina del presidente, Andriy Jermak, con el que discutió «la situación actual, la ayuda a Ucrania, las sanciones contra Rusia y la membresía de Ucrania en la UE». Tras esa charla, se reunió con Zelenski, que «le agradeció profundamente la visita». También se reunió con el presidente del parlamento ucraniano, Ruslan Stefantschuk, y con políticos de la oposición, además de con el primer ministro, Denys Shmyhal. Merz iba acompañado de su jefe de gabinete, Jacob Schrot, y el experto en política exterior de la CDU, Roderich Kiesewetter, que asistieron igualmente a las conversaciones con los diputados ucranianos Serhiy Taruta y Halyna Yanchenko, ambos del Grupo de Amistar Germano-Ucraniano.

El canciller Scholz se ha limitado a decir sobre este viaje que no tenía «objeciones», que había sido informado y que lo aprobaba. Asume que Merz le informará después con detalle, «cualquier otra cosa no sería buena manera de tratar entre nosotros en una democracia», pero contraprogramó en la agenda un importante acto diplomático, la escenificación del apoyo alemán a la adhesión de Suecia y Finlandia a la OTAN. Scholz invitó este martes al consejo de ministros alemán a las primeras ministras, Magdalena Andersson y Sanna Marin, con las que los socios de la ‘coalición semáforo’ han debatido las nuevas condiciones de seguridad en Europa y los nuevos paquetes de sanciones a Rusia. «Para nosotros, está claro que si estos dos países deciden que quieren ser parte de la alianza de la OTAN, entonces pueden contar con nuestro apoyo», les dijo. Marin, por su parte, subrayó que la invasión de Ucrania ha «cambiado drásticamente» el entorno de seguridad en Europa y que, en este contexto, «la política de puertas abiertas de la OTAN es ahora más importante que nunca».
Source: abc internacional

news :