China todavía no ha condenado la agresión militar rusa contra Ucrania ni la ha denominado invasión, a pesar de que ha expresado una profunda preocupación por la guerra. Pekín también se ha opuesto a las sancioens económicas contra Rusia, que dice que son unilaterales y no han sido autorizadas por el Consejo de Seguridad de la ONU.
«Las sanciones contra Rusia se están volviendo más y más indignantes», dijo Le en un encuentro sobre seguridad en Pekín, añadiendo que los ciudadanos rusos estaban siendo privados de acctivos extranjeros «sin razón». «La historia ha demostrado una y otra vez que las sanciones no resuelven los problemas. Las sanciones solo dañarán a las personas normales, afectarán a la economía y el sistema financiero, y empeorarán la economía global».
Rusia denomina a su agresión contra Ucrania una «operación especial», que no pretende ocupar un territorio sino destruir las capacidades militares de su vecino y capturar a los que denomina peligrosos nacionalistas.
Durante una llamada telefónica entre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente de China, Xi Jinping, el pasado viernes, Biden advirtió a su homólogo chino de las «consecuencias» que tendría que Pekín le diera apoyo material a Moscú, según la Casa Blanca.
Por su parte, el Kremlin ha exigido garantías legales de que la OTAN detendrá su expansión y volverá a sus fronteras de 1997.
Source: abc internacional